SAGITARIO

​

La flecha de Sagitario, tiene el poder de llegar lo más lejos posible, da el camino y el impulso característico del fuego para abrir nuevos horizontes, sacar potencialidades que estaban latentes, esperando su lanzamiento para emerger. Con esperanza, tiene la visión de sacar las cosas adelante, de inspirarse para penetrar en nuevos espacios y salir de los límites antes establecidos, creativo y de energía paternal, este punto del zodíaco proyecta y máquina nuevas combustiones divinas, va en busca de su propia verdad, que traza y sostiene hasta a veces fanatizarla y dogmatizarla. Guía espiritual, intérprete de la voz de Dios, Gurú que va de la obscuridad a la luz, dónde lo importante es el camino hacia la verdad inexistente, caminar es el fin y no el medio, es solo pulsión de la energía, no hay meta a la cual llegar. En la versión obscura de Sagitrio, el permanente movimiento no deja espacio para el compromiso con nada ni nadie, si algo se establece, sale huyendo y se cristaliza en la búsqueda, encontrando el sentido en cualquier instancia y detalles, que lo saque a la movilidad segura. El Centauro, que dispara una flecha, mitad caballo y mitad Dios, es la síntesis e integración entre lo humano y lo divino. Conciencia que, desde su libertad, es capaz de ir lejos en su travesía, hacia el encuentro con el sentido de la existencia misma. La seguridad con que Sagitario sostiene la flecha en tensión, muestra la confianza en sí mismo, y su destino, seguro del camino y guía con certeza a los demás,  siendo directo, claro y sincero. Dónde tengamos este despliegue de la energía en nuestra Carta Astral, tendremos el mapa de lo que nos hace sentido seguir en la vida, lo que nos inspira y cuánto somos capaces de ir más allá de nuestros límites.